El cannabidiol, más conocido por las siglas CBD, se está convirtiendo rápidamente en un suplemento cada vez más popular entre las personas que buscan mejorar su salud y bienestar general. 

Con sus numerosos beneficios terapéuticos potenciales, el CBD, un compuesto natural extraído de la planta de cannabis ha sido redescubierto para tratar una gran variedad de dolencias, desde la ansiedad y la depresión hasta el dolor crónico. 

Pero lo que mucha gente no sabe es que el CBD también puede utilizarse como medida preventiva para ayudar a mantener una buena salud. 

Esto significa que no sólo debes consumir cannabidiol cuando el trastorno ya se ha producido, sino también para evitar que tu cuerpo enferme. 

En este artículo analizaremos cómo el uso de productos de CBD para la prevención puede ayudarte a alcanzar un bienestar óptimo. Exploraremos los diversos usos del cannabidiol, incluyendo cómo se puede utilizar para reducir los niveles de estrés, aumentar la inmunidad, promover mejores hábitos de higiene y mucho más. También te daremos consejos sobre cómo elegir el producto adecuado para tus necesidades y estilo de vida, para que puedas aprovechar al máximo tu experiencia con el CBD.

¿Cómo funciona el CBD?

Hasta ahora hemos dicho que el CBD es un compuesto completamente natural que produce espontáneamente la planta de cannabis. No podemos hablar de un descubrimiento reciente puesto que el hombre ya lo utilizaba para tratar dolencias y enfermedades hace 5.000 años, pero sí de un redescubrimiento. De hecho, sus beneficios terapéuticos también lo han popularizado en nuestra sociedad en los últimos años.

El CBD, que ha atraído el interés de los científicos, ha sido estudiado por su potencial en el tratamiento de diversas afecciones y también se está investigando como posible medida preventiva para ciertos problemas de salud. 

Pero ¿cómo funciona? ¿Por qué principio es capaz de curar el organismo humano e incluso de mantenerlo sano para que no enferme?

El CBD actúa interactuando con el sistema endocannabinoide del organismo. El ECS regula muchas funciones corporales como el estado de ánimo, el apetito, el sueño y la respuesta del sistema inmunológico. El cannabidiol encaja en el mecanismo de este sistema uniéndose a sus receptores para regular los procesos. Es esta interacción la que mantiene el equilibrio del organismo.

En términos de prevención, los estudios sugieren que el CBD puede ayudar a proteger contra ciertas enfermedades al reducir la inflamación en el cuerpo y aumentar la inmunidad.

¿Puede ayudar el CBD en la prevención?

Sabemos que las palabras sin hechos y ejemplos concretos se quedan en meras palabras. Pero como no somos nosotros los que queremos convencerte del poder del CBD para la prevención, es la ciencia la que lo hace, deja que las pruebas hablen por sí solas. Nos limitaremos a ver casos en los que el cannabidiol puede ayudar a prevenir incluso enfermedades peligrosas, ayudándote a mantenerte sano y en forma.

Reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares

Las enfermedades cardiovasculares son una de las principales causas de muerte en todo el mundo y el riesgo de padecerlas es bastante elevado. Lo positivo es que esta tendencia puede reducirse con cambios en el estilo de vida y medidas preventivas, precisamente porque son los hábitos modernos los que aumentan la probabilidad de enfermar.

Recientemente, las investigaciones han demostrado que el CBD puede ser una forma prometedora de reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. De hecho, el CBD puede ayudar a disminuir la inflamación y el estrés oxidativo en el organismo, ambos asociados al riesgo de enfermedades cardiovasculares. También puede ayudar a reducir la presión arterial y regular los niveles de colesterol. Algunas investigaciones han sugerido incluso que el cannabidiol puede ayudar a proteger contra el ictus y el infarto al mejorar la salud del corazón.

Estudios con animales han demostrado que el CBD antiinflamatorio puede mejorar la función endotelial (el revestimiento de los vasos sanguíneos) favoreciendo el flujo sanguíneo al músculo cardíaco. Esto podría conducir potencialmente a la salud cardiovascular en general, así como reducir el riesgo de ataques al corazón.

Por último, se ha descubierto que el CBD tiene un efecto antiarrítmico en el tejido cardíaco al regular los canales de calcio en las células del corazón y disminuir los ritmos cardíacos anormales o las arritmias.

Aliado en la lucha contra el cáncer o sus síntomas

Aunque todavía se está estudiando la eficacia del CBD en el tratamiento del cáncer, hay pruebas que sugieren que puede actuar como aliado en la lucha contra esta devastadora enfermedad.

De hecho, el cannabidiol parece inhibir el crecimiento de varios tipos de células cancerígenas, incluidas las de mama, colon, páncreas y pulmón. Además, el CBD parece potenciar la eficacia de algunos fármacos de quimioterapia al mejorar su capacidad para eliminar las células cancerígenas.

Los estudios también han demostrado que el CBD puede reducir la proliferación de células cancerosas e inducir la muerte celular programada (apoptosis) en los tumores. Además, puede inhibir la formación de nuevos vasos sanguíneos (angiogénesis) alrededor de los tumores, reduciendo así su suministro de sangre y nutrientes.

La propiedad antiemética del CBD ayuda a reducir algunos de los efectos secundarios asociados a la terapia contra el cáncer, como las náuseas, los vómitos, la pérdida de apetito y el dolor. El CBD como analgésico ayuda tanto a contrarrestar las molestias producidas por la propia enfermedad como las que puede desencadenar el uso de fármacos potentes. 

Por supuesto, siempre es aconsejable consultar a un médico antes de iniciar una terapia basada en el CBD, especialmente si ya se están tomando otros medicamentos contra el cáncer.

Ayuda en el control de la obesidad

La obesidad es un problema que afecta a millones de personas en todo el mundo y plantea graves riesgos para la salud, como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer. Pero, ¿qué tiene que ver el CBD con la obesidad? ¿Y cómo puede ayudarnos a perder peso y a sentirnos mejor? 

Una de las formas en que el CBD puede ayudar a perder peso es reduciendo el apetito. A diferencia del THC, que estimula el apetito, el CBD actúa como antagonista de los receptores CB1, que intervienen en la regulación del apetito. Al bloquear estos receptores, el CBD puede disminuir las ansias de comer y promover un consumo adecuado de calorías.

Otro mecanismo por el que el CBD puede favorecer la pérdida de peso es aumentando el metabolismo de las grasas. En efecto, el CBD puede inducir la transformación de las células grasas blancas en células grasas marrones. Las primeras son las que almacenan el exceso de calorías y causan la obesidad, las segundas son las que queman calorías para producir calor y mantener nuestro cuerpo en el nivel térmico adecuado. Por lo tanto, tener más células de grasa marrón significa tener una mayor capacidad para deshacerse de la grasa y mantener un peso saludable.

Por último, el CBD puede ayudar a prevenir o aliviar las complicaciones asociadas a la obesidad, como la inflamación crónica, el colesterol alto, la hiperglucemia y los daños hepáticos. El CBD tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que pueden reducir el estrés oxidativo y la inflamación sistémica que subyacen a muchas enfermedades metabólicas. Además, puede mejorar la sensibilidad a la insulina y regular los niveles de azúcar en sangre, previniendo así la resistencia a la insulina y la diabetes. Por último, el CBD puede proteger el hígado de los daños causados por la acumulación de grasa y toxinas.

El CBD ayuda a mantener sano el cerebro

En primer lugar, el CBD es un neuromodulador, es decir, una sustancia que regula la actividad de las neuronas y los neurotransmisores del sistema nervioso central. Esto significa que el CBD puede influir en procesos como el aprendizaje, la memoria, el estado de ánimo y el sueño. Además, estimula la neurogénesis, es decir, la formación de nuevas células nerviosas, y la protección del cerebro frente a las enfermedades.

Varios estudios demuestran que el CBD puede ayudar a eliminar proteínas tóxicas relacionadas con enfermedades como el Alzheimer, el Parkinson y otras formas de demencia. Lo hace aliviando la inflamación, el daño oxidativo y promoviendo la regeneración celular en el cerebro.

Pero eso no es todo. El CBD también tiene efectos positivos sobre los ataques epilépticos, la ansiedad, el estrés y la depresión. Estas afecciones pueden perjudicar la salud cerebral y la calidad de vida de quienes las padecen. Actúa sobre los receptores cerebrales implicados en estos trastornos, como la serotonina, y los modula para reducir los síntomas y favorecer la relajación.

A diferencia del THC, que puede causar daños cerebrales, sobre todo cuando se consume durante periodos prolongados en personas jóvenes, el CBD te protege. Por eso es muy importante comprar productos que tengan un contenido de THC legal, es decir, bajo.

Protección de los huesos

Como ya hemos visto, el CBD es un potente antinflamatorio y, por ello, puede mejorar la densidad ósea e incluso promover el crecimiento de nuevos huesos. 

En primer lugar, puede ayudar a tratar o prevenir la osteoporosis, una enfermedad causada por la pérdida de masa ósea debido al envejecimiento u otros factores. El CBD puede estimular la formación de nuevas células óseas e inhibir la destrucción de las células óseas viejas.

En segundo lugar, el CBD se utiliza ampliamente para la artrosis y la artritis. Ayuda a reducir la inflamación y el dolor debido a su acción antiinflamatoria y analgésica, tanto cuando la enfermedad es inflamatoria como cuando está relacionada con la edad.

Además, el CBD puede ayudar a prevenir y tratar la osteopenia, cuando la densidad ósea es más baja de lo normal, mejorando la densidad y previniendo la pérdida ósea.

Por último, el cannabidiol puede ayudar a prevenir y tratar la osteomalacia, una enfermedad en la que los huesos no se mineralizan correctamente y permanecen muy débiles, estimulando la mineralización ósea y favoreciendo la absorción de vitamina D.

CBD amigo de la piel

La piel es nuestro órgano más grande y el más expuesto a agentes externos como el sol, la contaminación, las bacterias, los virus, los productos químicos y los radicales libres. Estos factores pueden dañar la piel y causar inflamación, envejecimiento prematuro, acné, eczema, psoriasis, dermatitis y otras enfermedades. 

Para proteger la piel de estos peligros, el CBD puede ser de gran ayuda. De hecho, actúa sobre los receptores del sistema endocannabinoide que también están presentes en la piel y de esta forma modula la respuesta inmunitaria reduciendo la inflamación y previniendo las infecciones.

Además, el CBD tiene un efecto antioxidante que contrarresta el estrés oxidativo causado por los radicales libres y ralentiza el proceso de envejecimiento de la piel.

Por último, el CBD tiene un efecto seborregulador que equilibra la producción de sebo y previene la formación de acné.Por lo tanto, además de proteger la piel de factores externos, el CBD también puede prevenir o aliviar enfermedades cutáneas que tienen un componente inflamatorio o autoinmune, como el acné, el eccema y la psoriasis.

Qué productos de CBD para el consumo diario

Llegados a este punto, debemos entender qué son los productos de CBD para la prevención de las afecciones que acabamos de comentar. De esta forma sabrás qué utilizar en cada situación.

Estos son los más comunes:

• Aceite de CBD: es el producto más sencillo y versátil, puedes tomarlo debajo de la lengua o añadirlo a comidas o bebidas, tiene efectos relajantes, antiinflamatorios y analgésicos, y es útil para combatir el estrés, la ansiedad, el insomnio, el dolor crónico, el cáncer y las enfermedades cardiovasculares como puedes leer en nuestros testimonios sobre el aceite de CBD;
• Crema de CBD: es un producto que se puede aplicar sobre la piel para tratar o prevenir enfermedades; además tiene un efecto hidratante, calmante y regenerador, y deja la piel suave y radiante;
• Flores de CBD: son la forma más natural de CBD, puedes usarlas a través del vaping para aprovechar todos sus efectos calmantes, por ejemplo, si quieres usar CBD para la ansiedad y el estrés diarios.

Recuerde que la salud es una prioridad y que tomar decisiones con conocimiento de causa es crucial. Elija productos fiables, investigue a fondo y consulte a profesionales cualificados para garantizar su seguridad y bienestar.

Si quieres probar alguno de los productos que hemos mencionado como gesto de amor hacia ti mismo, puedes visitar nuestra tienda online. Echa un vistazo a todos los productos de CBD que hemos diseñado para quienes, como tú, quieren cuidar su organismo de forma natural.