A pesar de la reputación secular de país fuertemente conservador, Alemania se adelanta a muchos otros y se convierte en la mayor nación europea en legalizar, aunque sea parcialmente, el consumo recreativo de cannabis. Y no, no hablamos de la llamada «hierba legal» sino del cannabis tradicional.
La legalización del cannabis es desde hace mucho tiempo uno de los temas más debatidos entre los gobiernos de los distintos países europeos y protagonista de numerosas manifestaciones populares. Por un lado, se correría el riesgo de aumentar el posible fenómeno de la adicción y el abuso, con el peligro de que el consumo se extendiera incluso entre los menores. Por otro, supondría una gran afrenta al mercado negro, reduciendo enormemente sus beneficios, que en cambio irían a parar directamente a los bolsillos del Estado, aumentando así los ingresos fiscales y la creación de nuevos puestos de trabajo.
Sin embargo, si queremos disipar algunos mitos, lo que resulta en un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de 2024 es que alrededor del 12% de los jóvenes de 15 años en Europa han consumido cannabis al menos una vez en su vida. Con la legalización, los controles aumentarían en cada aspecto de la venta y el consumo, lo que dificultaría enormemente el acceso de un menor. Además, se certificaría y controlaría la calidad de las flores y los productos de cannabis.
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Pero volvamos a Alemania: veamos ahora la nueva situación reglamentaria.
El cannabis es legal en Alemania
El Gobierno alemán ha decidido legalizar el cannabis en Alemania de forma oficial a partir del 1 de abril. El Bundestag, parlamento alemán, ha decretado que la posesión y el consumo privado y personal hasta 25 gramos de cannabis será legal para todas las personas mayores de 18 años.
No sólo eso: también se permitirá el cultivo, siempre que no se supere la cantidad total de tres plantas por persona. En cuanto al cannabis seco, la cantidad permitida será de hasta hasta los 50 gramos por persona. Sin embargo, la venta o la entrega del producto a otras personas, sigue estando estrictamente prohibida.
Clubes sociales de cannabis en Alemania: las reglas
A partir de julio de 2024, los clubes sociales de cannabis alemanes podrán solicitar una licencia para cultivar cannabis. Estos serán el único lugar autorizado donde se puede consumir cannabis en Alemania, siempre que se sea socio. El número máximo de socios permitido por club es 500, a los que se podrán vender 25 gramos al día hasta una cantidad de 50 gramos al mes (30 para los menores de 21 años).
Ahora surge la pregunta: ¿Está empezando el turismo de la hierba en Alemania? La respuesta, al menos por ahora, es no. De hecho, los requisitos para ser socio de un club social son alcanzar la mayoría de edad y vivir en el país durante al menos seis meses. Por esta razón, los turistas no podrán comprar el cannabis libremente en Alemania.
Normativa sobre el cannabis al aire libre en Alemania
El Gobierno alemán también ha establecido unas reglas para el consumo de cannabis al aire libre. En las zonas peatonales, el horario en el que está permitido fumar cannabis es de 20:00 a 7:00 horas, manteniendo una distancia de al menos 100 metros de colegios, guarderías o instalaciones deportivas. Pero, cuidado, en presencia de menores, el consumo está siempre prohibido.
Por lo tanto, estas reglas tienen el objetivo de regular el uso de cannabis de forma responsable, reducir el mercado negro y mejorar la seguridad del producto para los consumidores, manteniendo al mismo tiempo medidas de protección para los menores y las zonas sensibles.
Impacto económico de la legalización del cannabis en Alemania
Como ya hemos mencionado, la legalización del cannabis en Alemania tendrá un impacto económico sin precedentes: se espera que este nuevo mercado pueda generar unos ingresos fiscales de miles de millones de euros, creando nuevas oportunidades profesionales.
En particular, los ámbitos principales de crecimiento serán la fiscalidad, que contribuirá a enriquecer las arcas del Estado, y el sector agrícola, que por fin podrá ampliar su producción a sectores nuevos y diversificados.
Los efectos sociales y culturales de la legislación
Con la legalización del cannabis, se producirá en Alemania una depuración del producto en Alemania que transformará la percepción pública y fomentará un acercamiento más sano y consciente. El cannabis ya no será un producto a demonizar, sino a apreciar por sus efectos beneficiosos tanto para uso recreativo como medicinal.
Otro aspecto a tener en cuenta es la descriminalización, que reducirá el número de personas detenidas y encarceladas por delitos menores relacionados con la venta y el consumo de cannabis.
¿Y en España?
En España, la cannabis es técnicamente ilegal, pero existe una zona gris legal que permite el cultivo y consumo privado, especialmente dentro de los clubes sociales de cannabis.
Estos clubes, populares en ciudades como Barcelona, son asociaciones privadas donde los miembros pueden cultivar y consumir cannabis en un entorno regulado y seguro. Solo los miembros registrados pueden participar, y el consumo está restringido a los espacios del club. Estos clubes operan bajo regulaciones internas y promueven un consumo responsable y controlado.
De hecho, España es uno de los países que se ha sumado a la tendencia europea de permitir la existencia de clubes sociales de cannabis y tolerar el consumo privado en ciertos contextos, diferenciándose de otros países como Italia, donde la legislación sigue siendo más restrictiva.
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Mientras que en España se permite el cultivo y consumo en espacios privados bajo ciertas condiciones, como en los clubes, Italia aún mantiene una postura más conservadora respecto a la legalización del uso recreativo, limitando significativamente el acceso a este tipo de consumo.