Description
La naturaleza nos ofrece una amplia gama de ingredientes que pueden ayudar a mejorar la salud y el bienestar. Entre ellas se encuentran muchas plantas y hierbas que pueden ofrecer una gran variedad de beneficios para nuestro organismo. En este artículo, exploraremos los beneficios de algunos ingredientes naturales populares como el cáñamo, la manzana, las hojas de zarzamora, los escaramujos, las zanahorias, la melisa, el aroma natural, la verbena entera, las bayas de saúco, los gajos de manzana, las flores de saúco, las raíces de berberis, el leptospermum petersonii, la manzanilla, la acedera, los pétalos de rosa, la filipéndula y la malva.
Cáñamo: El cáñamo es una planta que ofrece numerosos beneficios para la salud. Es rico en ácidos grasos esenciales omega-3 y omega-6 que pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud del corazón. Además, el cáñamo también contiene una serie de compuestos beneficiosos como los cannabinoides, incluido el cannabidiol (CBD), que pueden ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, mejorar el sueño y reducir el dolor.
Manzana: La manzana es una rica fuente de antioxidantes, vitaminas y minerales. También contiene una fibra soluble llamada pectina, que puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y a mantener un tránsito intestinal regular. Además, las manzanas también contienen compuestos antiinflamatorios que pueden ayudar a prevenir enfermedades crónicas como la diabetes, las cardiopatías y el cáncer.
Hojas de zarzamora: Las hojas de zarzamora son ricas en antioxidantes y ácidos fenólicos que pueden ayudar a reducir la inflamación y proteger el organismo de los daños causados por los radicales libres. Además, las hojas de zarzamora también contienen compuestos beneficiosos como vitamina C, calcio y hierro, que pueden ayudar a reforzar el sistema inmunitario y mejorar la salud ósea.
Cinorrodo: El cinorrodo es una rica fuente de vitamina C y antioxidantes. Su alta concentración de ácido ascórbico puede ayudar a reforzar el sistema inmunitario y proteger el organismo de los daños causados por los radicales libres. Además, el chinorrode también puede ayudar a reducir los síntomas del resfriado y la gripe.
Zanahorias: Las zanahorias son una fuente excelente de betacaroteno, una forma de vitamina A que puede ayudar a proteger la vista, reforzar el sistema inmunitario y mejorar la salud de la piel. Además, las zanahorias son también una rica fuente de antioxidantes que pueden ayudar a proteger nuestro organismo de los daños causados por los radicales libres.
Melisa: la melisa es una planta que se utiliza en infusiones y complementos alimenticios por sus propiedades antioxidantes y calmantes. Estudios recientes han demostrado que la melisa puede ayudar a reducir la ansiedad y el dolor.
Verbena entera: La verbena es una planta que se utiliza para hacer infusiones por sus propiedades calmantes y digestivas. La verbena puede ayudar a aliviar la ansiedad, el insomnio y el dolor de estómago.
Bayas de saúco: las bayas de saúco son una rica fuente de antioxidantes y vitamina C. Las bayas de saúco se han estudiado por sus efectos positivos sobre la salud del sistema inmunitario y su capacidad para reducir la inflamación.
Rodajas de manzana: las rodajas de manzana son una rica fuente de antioxidantes y fibra. Las manzanas se han estudiado por sus efectos positivos sobre la salud del corazón y su capacidad para regular la glucosa en sangre.
Flores de saúco: Las flores de saúco se utilizan para preparar infusiones por sus propiedades calmantes y antiinflamatorias. La flor de saúco puede ayudar a aliviar la ansiedad, los dolores de garganta y los resfriados.
Raíces de berberis: las raíces de berberis se utilizan para preparar infusiones por sus propiedades digestivas y antiinflamatorias. Las raíces de Berberis pueden ayudar a aliviar el dolor de estómago y reducir la inflamación.
Leptospermum petersonii: El Leptospermum petersonii es una planta que se utiliza para elaborar infusiones por sus propiedades antibacterianas y antifúngicas. Leptospermum petersonii puede ayudar a aliviar los síntomas de las infecciones bacterianas y fúngicas.
Manzanilla: La manzanilla es una planta que se utiliza para elaborar infusiones por sus propiedades calmantes y antiinflamatorias. El té de manzanilla puede ayudar a aliviar la ansiedad, los dolores de estómago y los dolores de cabeza.
Acedera: la acedera es una planta que se utiliza para elaborar infusiones por sus propiedades digestivas y depurativas. La acedera puede aliviar los dolores de estómago y purificar la sangre.
Pétalos de rosa: los pétalos de rosa se utilizan para preparar infusiones por sus propiedades calmantes y antiinflamatorias. Los pétalos de rosa pueden ayudar a aliviar la ansiedad, los dolores de cabeza y los dolores menstruales.
La filipéndula, también conocida como reina de los prados, es una planta perenne que crece en los humedales de Europa y Asia. Contiene salicilatos naturales que actúan como analgésicos y antiinflamatorios, por lo que resulta útil para aliviar el dolor y la inflamación en artritis, dolores musculares y cefaleas. Además, la filipéndula es también un diurético natural que ayuda a eliminar el exceso de líquido del organismo, reduciendo la hinchazón.
La malva, por su parte, es una planta anual que crece comúnmente en Europa y Asia. Sus hojas, flores y raíces contienen compuestos antiinflamatorios que pueden ayudar a reducir la hinchazón y la irritación en trastornos gastrointestinales como gastritis y úlceras. Además, la malva es también un excelente emoliente que ayuda a suavizar e hidratar la piel, por lo que resulta útil para tratar la dermatitis y las irritaciones cutáneas.
Cómo preparar una tisana perfecta
Pero, ¿cómo preparar una tisana perfecta que mantenga a la perfección todas las propiedades organolépticas y aromas de la tisana que hemos elegido? ¡Averigüémoslo juntos!
Cómo preparar nuestra tisana con agua caliente
Para preparar una tisana con extracción en caliente, siga estos sencillos pasos:
- llene el infusor con nuestra tisana;
- introduce el infusor en la tetera o taza de tu elección;
- Hervir agua en una tetera o cacerola;
- Vierte el agua hirviendo en el recipiente donde has colocado el infusor;
- Ahora cúbrelo con una tapa o un paño y espera unos diez minutos;
- retirar el infusor, dejar enfriar ligeramente y consumir la bebida resultante.
La mejor manera de conservar una tisana extraída caliente
Hay que tener en cuenta que las infusiones que se extraen en caliente deben consumirse inmediatamente después de su extracción porque, al enfriarse, se desencadena un proceso de oxidación que hará que se pierdan muchas de las propiedades organolépticas y aromas que contienen estas infusiones.
Uno de los mejores métodos para conservar todas las propiedades de nuestra infusión extraída en caliente es, sin duda, el termo.
Si no tienes un termo, también puedes utilizar una tetera equipada con un calentador.
Cómo preparar una tisana fría
Cuando llega el calor, nadie nos prohíbe disfrutar de una tisana bien fresquita, porque reconozcámoslo, además de su aroma fresco, también tiene propiedades para calmar la sed y es, sin duda, más saludable que muchas bebidas industriales azucaradas.
Para obtener una infusión de hierbas con extracción en frío, debemos utilizar el método Cold Brew, sólo tienes que seguir estos sencillos pasos:
- Llena el infusor con la infusión que hayas elegido;
- Llena una jarra o una botella con agua fría o a temperatura ambiente;
- Coloque el infusor en la jarra o el biberón y cúbralo con un paño o una tapa;
- Deje reposar la mezcla en el frigorífico de tres a seis horas;
- Retire el infusor y guárdelo en el frigorífico hasta el momento de servir.
La tisana puede conservarse en el frigorífico hasta siete días y conservará todas las propiedades beneficiosas y gustativas de los ingredientes que hayas utilizado.