El estrés es un proceso biológico diseñado para ayudarnos a reaccionar ante el peligro y motivarnos, pero cuando se vuelve excesivo, se convierte en ansiedad y ésta tiende a perjudicarnos.

Utilizar soluciones naturales representa un enfoque seguro para enfrentar y prevenir los trastornos de ansiedad, sin preocuparse de efectos secundarios, fortalecer todo el organismo y enfrentar los desafíos de la vida con energía nueva.

En la historia antigua de la humanidad, la respuesta al estrés nos ayudaba a luchar o a huir de un peligro inminente. Hoy en día hay muchos factores relacionados con el estilo de vida y acontecimientos que pueden desencadenar la misma respuesta fisiológica, perjudicial para el cuerpo si se expone a largo plazo.

La respuesta al estrés está pensada sólo como temporal y nos da un impulso extra de energía, tiempos de reacción rápido y concentración cognitiva para nuestra autoconservación. Cuando la respuesta al estrés está «secuestrada», puede hacer más mal que bien, haciéndonos más susceptibles a enfermedades, lesiones y trastornos de ansiedad.

Muchas personas están buscando soluciones naturales para gestionar el estrés, como el yoga, la meditación, la dieta, y los productos de CBD se mencionan a menudo en este contexto.

Hablaremos de lo que es el CBD y de algunas investigaciones realizadas sobre sus efectos. A continuación, ilustraremos la importancia de encontrar productos de alta calidad y libres de contaminantes antes de descubrir las maneras diferentes en que se puede utilizar este compuesto para alcanzar tus objetivos de salud.

¿Cómo se manifiesta el Estrés en el Cuerpo?

El Estrés es una respuesta fisiológica, también conocida como reacción de «lucha o huida», en la que interviene el sistema nervioso simpático. Se trata de un mecanismo fisiológico de protección que prepara al organismo para enfrentarse directamente al peligro o alejarse de él.

El fisiólogo estadounidense, el Dr. Walter Cannon, fue el primero en describir este mecanismo en la década de 1920, cuando observó la cadena de reacciones en el interior del organismo que movilizaba los recursos del cuerpo para hacer frente a las amenazas.

En respuesta al peligro, el sistema nervioso simpático toma el control liberando hormonas del estrés: cortisol, adrenalina y noradrenalina. Estas hormonas aumentan el ritmo cardíaco, la presión arterial, la respiración y dilatan las pupilas para evaluar el entorno y responder con rapidez, aumentando temporalmente la fuerza y la velocidad.

Este tipo de estrés puede ayudarnos a rendir mejor en el deporte, en la escuela o en el trabajo, pero cuando no existe un estrés percibido como real y nuestros sistemas están constantemente bombardeados por situaciones mentalmente estresantes, podemos correr el riesgo de desarrollar trastornos de ansiedad y poner en peligro nuestra salud mental.

¿Qué dice la Ciencia sobre CBD y Estrés?

El cannabidiol, o CBD, es un compuesto no tóxico extraído de la planta de cannabis. Muchas personas recurren a los productos con CBD para alcanzar diversos objetivos relacionados con el bienestar y para combatir el estrés.

El CBD y otros cannabinoides son muy similares a los neurotransmisores del cuerpo llamados endocannabinoides, que forman parte del sistema endocannabinoide (SEC).

El SEC funciona como un sistema de señalización celular en todo el cuerpo para apoyar la homeostasis (equilibrio) para una función óptima. Cuando el cuerpo se encuentra en un estado de desequilibrio, es más propenso al estrés y a las enfermedades.

Los investigadores creen que el CBD tiene efectos tan amplios en todo el organismo porque contribuye al funcionamiento general de la SEC como moderador de algunas de nuestras funciones más vitales, como la respuesta al estrés, el metabolismo energético, la percepción del dolor y la función inmunitaria.

CBD y Ansiedad: Dosis y Modo de Consumo

La dosis de CBD varía en función de la respuesta individual a la ingesta de diferentes cantidades de CBD. Hasta la fecha, la mayoría de los estudios científicos han confirmado la total seguridad de este principio activo.

Las dosis pueden variar entre 50 mg y 120 mg de CBD al día.

Se recomienda empezar con una dosis baja e ir aumentándola gradualmente hasta conseguir el efecto deseado. Por ejemplo, 5 gotas por la mañana y 5 por la noche podría ser una dosis ideal para empezar.

Para trastornos de ansiedad leves, recomendamos el uso del aceite de CBD en cápsulas, mientras que en el caso de ataques de pánico y ansiedad crónica, es preferible optar por el aceite al 25%.

Los beneficios del CBD para combatir el estrés

El CBD se ha convertido rápidamente en un popular suplemento para la salud y el bienestar debido a su interacción única con el sistema endocannabinoide, que regula el funcionamiento óptimo del cuerpo a través de la homeostasis.

Aunque la investigación sobre el CBD aún está en pañales, muestra un gran potencial para usos terapéuticos, y muchas personas lo utilizan como parte de sus rutinas de autocuidado para controlar niveles saludables de estrés debido a sus suaves acciones para favorecer el sueño, aliviar molestias musculares y corporales, y calmar sentimientos nerviosos o pensamientos ansiosos.

Es importante tener en cuenta que el CBD no es una solución milagrosa y, dado que aún es relativamente nuevo en el mercado, no todos los productos de CBD ofrecen el mismo nivel de beneficios para el bienestar.

Tu rutina de sueño

Cuando nos sentimos estresados, a menudo tenemos dificultades para dormir bien. No sólo nos mantienen despiertos los pensamientos preocupantes, sino que los signos físicos del estrés pueden impedirnos descansar.

Muchas personas recurren a rituales nocturnos para aquietar la mente y alcanzar un estado de relajación. Por ejemplo, un baño relajante por la noche, ejercicios de respiración o meditación pueden ayudarnos a descomprimirnos y relajarnos después de un día estresante. Estos rituales pueden mejorarse con nuestro Aceite Solución Sueño, que combina CBD de alta calidad con Valeriana y CBN. Estos deliciosos sabores trabajan junto con el CBD para conducirte a una noche de sueño tranquilo. Despiértate sintiéndote fresco y renovado.

Tu régimen de bienestar

Rutinas de bienestar como el ejercicio, el yoga y la meditación pueden calmar los pensamientos que nos distraen, ayudándonos a sentirnos más centrados y equilibrados. Sin embargo, cuando estamos estresados, a veces nos enfrentamos a bloqueos mentales. Esto puede resultar problemático mientras participamos en rituales de bienestar.

El CBD puede ayudar a calmar la mente, permitiéndonos entrar en un estado más relajado y concentrado. Entrando fácilmente en el ritmo de un entrenamiento ligero o de los ejercicios de respiración asociados al yoga o la meditación, podemos aprovechar al máximo los efectos vigorizantes de estas rutinas.

Otros métodos Naturales para combatir la ansiedad

Hay diferentes métodos naturales que se pueden utilizar para combatir la ansiedad, Aquí tienes algunas sugerencias:

1. Ejercicio: El ejercicio regular puede ayudar a reducir los niveles de ansiedad y mejorar el bienestar general. Incluso un breve paseo o una sesión de yoga pueden marcar la diferencia.
2. Respiración Profunda y Meditación: La práctica de la respiración profunda y la meditación pueden calmar el sistema nervioso, reducir el estrés y aliviar la ansiedad.
3. Nutrición equilibrada: Una dieta sana y equilibrada puede condicionar positivamente tu estado mental. Reduce el consumo de cafeína y azúcares refinados y favorece los alimentos ricos en nutrientes.
4. Hierbas y suplementos: Algunas hierbas y suplementos como la manzanilla, la valeriana o el magnesio pueden tener efectos calmantes y reducir la ansiedad.
5. Aceite de CBD: el CBD (cannabidiol), extraído de la planta de cannabis, puede contribuir a reducir los síntomas de ansiedad y estrés.
6. Terapias conductuales y cognitivas: Técnicas como la terapia cognitivo-conductual (TCC) pueden ser muy eficaces para controlar la ansiedad.
7. Gestión del estrés: aprender técnicas de gestión del estrés como la planificación del tiempo, la relajación muscular progresiva o la visualización guiada puede ayudar a prevenir la ansiedad.
8. Sueño adecuado: El sueño de calidad es crucial para mantener el equilibrio mental. Intenta seguir una rutina regular y crear un entorno propicio para el descanso.
9. Limitar la exposición a las fuentes de estrés: Intenta identificar y limitar las situaciones o actividades que aumentan tus niveles de ansiedad.
10. Apoyo social: hable con amigos, familiares o profesionales de la salud mental. La franqueza y el apoyo social pueden influir positivamente en el control de la ansiedad.

Recuerda que es importante consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en tu rutina o empezar a utilizar nuevos métodos para controlar la ansiedad.