Description
La tisana de jengibre y limón es una bebida muy popular por sus numerosos beneficios para la salud. Esta bebida se ha utilizado en la medicina tradicional durante siglos, y los estudios modernos han demostrado que puede ayudar a mejorar la digestión, el sistema inmunitario e incluso el metabolismo.
Beneficios para la digestión
La tisana de jengibre y limón es un remedio natural eficaz para problemas digestivos como náuseas, vómitos y dolor de estómago. El jengibre contiene compuestos como el gingerol y el shogaol que ayudan a reducir la inflamación y calmar el tracto gastrointestinal. Además, el jengibre puede estimular la producción de bilis y aumentar la motilidad intestinal, ayudando así a prevenir el estreñimiento.
El limón, por su parte, contiene ácido cítrico que estimula la producción de enzimas digestivas. Además, la vitamina C presente en los limones puede mejorar la salud del sistema inmunitario y reducir la inflamación. El limón también es un diurético natural, que puede ayudar a eliminar toxinas y sustancias de desecho a través de la orina.
Beneficios para el sistema inmunitario
La tisana de jengibre y limón puede ayudar a reforzar el sistema inmunitario gracias a las propiedades antibacterianas y antioxidantes presentes en ambos ingredientes.
El jengibre contiene gingerol y shogaol, dos compuestos con propiedades antimicrobianas que pueden ayudar a combatir las infecciones bacterianas. Además, el jengibre contiene antioxidantes como los gingeroles y las paradojas, que ayudan a prevenir el daño celular causado por los radicales libres.
El limón, por su parte, es rico en vitamina C, un antioxidante que puede ayudar a proteger las células de los daños causados por los radicales libres. La vitamina C también puede ayudar a mejorar la salud del sistema inmunitario al aumentar la producción de glóbulos blancos que combaten las infecciones.
Beneficios para la pérdida de peso
La tisana de jengibre y limón también puede ayudarte a perder peso gracias a las propiedades adelgazantes de ambos ingredientes.
El jengibre puede ayudar a reducir el apetito y aumentar la sensación de saciedad. Además, el jengibre puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud metabólica, aumentando la capacidad del organismo para quemar calorías y grasas.
El limón, por su parte, contiene pectina, una fibra soluble que puede ayudar a reducir el apetito y ralentizar la absorción de hidratos de carbono. Además, el limón contiene ácido cítrico, que puede ayudar a aumentar el metabolismo y quemar grasa.
Cómo preparar una tisana perfecta
Pero, ¿cómo preparar una tisana perfecta que mantenga a la perfección todas las propiedades organolépticas y aromas de la tisana que hemos elegido? Averigüémoslo juntos.
Cómo preparar nuestra tisana con agua caliente
Para preparar una tisana con extracción en caliente, siga estos sencillos pasos:
- llene el infusor con nuestra tisana;
- introduce el infusor en la tetera o taza de tu elección;
- Hervir agua en una tetera o cacerola;
- Vierte el agua hirviendo en el recipiente donde has colocado el infusor;
- Ahora cúbrelo con una tapa o un paño y espera unos diez minutos;
- retirar el infusor, dejar enfriar ligeramente y consumir la bebida resultante.
La mejor manera de conservar una tisana extraída en caliente
Hay que tener en cuenta que las infusiones que se extraen en caliente deben consumirse inmediatamente después de la extracción, ya que, con el enfriamiento, se desencadena un proceso de oxidación que provocará la pérdida de muchas de las propiedades organolépticas y aromas que contienen estas infusiones.
Uno de los mejores métodos para conservar todas las propiedades de nuestra infusión extraída en caliente es, sin duda, el termo.
Si no tienes un termo, también puedes utilizar una tetera equipada con un calentador.
Cómo preparar una tisana fría
Cuando llega el calor, nadie nos prohíbe disfrutar de una infusión fresca, porque admitámoslo, además de su fresco aroma, tiene propiedades para calmar la sed y es sin duda más saludable que muchas bebidas industriales azucaradas.
Para preparar una tisana de extracto frío, necesitamos utilizar el método Cold Brew, sólo tienes que seguir estos sencillos pasos:
- Llena el infusor con la infusión que hayas elegido;
- Llena una jarra o una botella con agua fría o a temperatura ambiente;
- Coloque el infusor en la jarra o el biberón y cúbralo con un paño o una tapa;
- Deje reposar la mezcla en el frigorífico de tres a seis horas;
- Retire el infusor y consérvelo en el frigorífico hasta el momento de servir.
La tisana puede conservarse en el frigorífico hasta siete días y conservará todas las propiedades beneficiosas y gustativas de los ingredientes que hayas utilizado.